Otra razón de peso para pensar en la instalación de paneles solares es de carácter económico. Podrás preguntarte: ¿Y no resulta más caro instalar unos equipos que pagar simplemente la factura de electricidad?
La respuesta más contundente es que, al producir su propia energía, se reduce la facturación eléctrica en un 90%. Este aspecto adquiere mayor relevancia con el tiempo porque la tendencia de los costos de facturación eléctrica es al alza constante.
Lo que en el momento inicial de la instalación representó una inversión, después sigue prestando servicios sin requerir nuevos gastos. El sistema seguirá produciendo electricidad a partir de la disponibilidad ilimitada de luz solar.